«Entonces les dice Jesús: «No temáis. Id, avisad a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.»» (Mt 28,10).
Han pasado varios días desde el domingo de Resurrección y quizá, como yo, muchos siguen buscando respuestas a tantas preguntas que surgen con el paso del tiempo y de los acontecimientos.
A los pies de mi Madre del Cielo, se me ha mostrado una palabra: “Id a decir a mis hermanos que vayan a Galilea, allí me verán”.
Esta palabra la cantamos en las antífonas del Domingo de Resurrección en Vísperas y durante toda la Octava de Pascua. Pero… ¿qué es Galilea? Y en el corazón sale una voz: Galilea es la realidad diaria en la que vive cada persona y es irremplazable; Galilea es nuestra historia personal y social; no es algo imaginario o solo el lugar físico al que Jesús les dice que vayan; podemos decir que también le dice a los discípulos: entren en su ser, en su yo más profundo y vivan en su realidad, y es allí donde me verán, no en las cosas extraordinarias, aunque también lo haga; no lo busquemos solo en visiones, milagros, que ciertamente los hay, sino en el milagro de nuestra vida día a día; también caí en la cuenta que no solo dice que vayan a Galilea y allí me verán; si no que dice: “Id, avisad a mis hermanos”…
No es quedarme con esta buena noticia: es anunciar, es decirle al otro que no tiene que vivir cosas raras, poco usuales… ¡No! Puedes ver a Dios en esta realidad de hoy, que muchas veces es dolorosa, es dura, es injusta, pero es buscar no ver la imagen que yo quiero de Dios, sino el Dios que realmente está allí. Porque Él es Él y no lo que nosotros queremos ver. Lo mismo sucede con los otros: son lo que son, y si espero ver otra cosa de lo que son, si solo espero ver lo que yo quiero, estaré decepcionado porque cada cual es lo que es al igual que lo somos nosotros y nadie puede quitar o añadir a lo que somos ni pedirnos ser otra cosa.
Hay que anunciar que vayamos a Galilea, que no huyamos de ella… Es anunciar un viaje a nuestro propio ser… ¿Por qué no ponernos en camino a redescubrir y hacer totalmente VIDA nuestra Galilea?
Cristo ha resucitado y nos espera en Galilea. Él va delante.
Yudis Isabel de la Santa Cruz
Talavera la Real (Badajoz)