Sevilla, ciudad capital de la provincia homónima. Fundada –según algunos historiadores por los fenicios, habitada por los cartagineses y luego por los romanos, recibe de estos el nombre de Híspalis, latinización de su nombre original “Ispal”. Sede en ocasiones del reino visigodo, capital del Imperio Almohade, saqueada por los vikingos… Sevilla es reconquistada en 1248 bajo el reinado de Fernando III, el Santo, sepultado en su Catedral, al pie de la Virgen de los Reyes.
Es la ciudad de la Giralda, de la Torre del Oro, del Archivo de Indias, del Parque de María Luisa, del Barrio de Triana y del río Guadalquivir. La de la Virgen Macarena y las Santas Justa y Rufina, martirizadas en el siglo III.
La Sevilla que conocerá Teresa de Jesús es la del siglo XVI, marcado centro multicultural y económico, puerto de Indias, la de los barcos que parten sin cesar hacia América o arriban del Nuevo Mundo con su carga de riquezas y novedades.